La proximidad o lejanía entre dos objetos, o el intervalo de tiempo que sucede entre esos mismos objetos es denominado como distancia…
La distancia es ese “objeto” que tantas veces nos ha hecho sentirnos tan mal, personalmente la distancia, el tic y el tac del reloj que rodea al susodicho fenómeno me mata, me mató y me matará… La distancia que me has regalado un día sin más hizo que la caída fuese muy larga, que la distancia que recorrió mi cuerpo en el tiempo fuera tremendamente dura y mareante. Y si las noches corrigen los días, para mí los días son mis noches y sorbo a sorbo firmé una guerra interior que no supe aceptar entre el desdén de una puerta entreabierta.
Me puse en la fila sin estrés, ni valium, ni tilas, no me pedí primero por el respeto que le mantengo a las normas aceptadas por otros y sin consultarlas conmigo; miré a la luna en su cuarto menguante y encontré una garganta rota en el futuro, en el ayer y en el todavía…
Aprendí a superar la distancia por el simple gesto de la misma, porque el movimiento de la distancia, el consumo de la otra distancia… el pisar de la distancia y agotamiento muscular de la misma me dio la vida física y mentalmente. Y sigo vivo pero no estoy totalmente completo… noto tantísimo tu ausencia, y los papeles azules de los caramelos de siempre me entregaron otra vez un poquito más de: …
